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El diseño argentino se reivindica en el mercado internacional de la moda

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EFE
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28 feb. 2011

Jon Laiseca

Buenos Aires, 25 feb (EFE).- Los diseñadores argentinos aprovecharon la décima edición de la Semana de la Moda de Buenos Aires, la BAFWeek, como plataforma para proyectar sus creaciones en el exterior y reivindicar su papel en un mercado cada vez más globalizado.



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"En este momento, Argentina tiene una gran oportunidad porque hay mucho talento, hay muchas ideas y estamos empezando a salir al exterior", resume a Efe la diseñadora Luz Arias, una de las expositoras de la cita porteña.

Por las pasarelas de la BAFweek han desfilado las propuestas de los modistos argentinos para él otoño/invierno austral, con una oferta de colores pastel, estampados y una mirada retro a los años setenta y a los tejidos naturales, como la lana.

"Desde Japón hasta Europa", asegura Arias, la atención se está centrando "muy seriamente" en el diseño argentino y el sector nacional está adoptando un discurso "interesante".

En el marco de la BAFWeek, la cita de moda más importante de Argentina, "hubo reuniones con importantes empresas del exterior" interesados por el evento y porque están abriendo la mente a otras ideas, explica.

También para la diseñadora Isabel Inchauspe la moda argentina "tiene bastante aceptación" en el exterior porque "últimamente hay una movida muy creativa".

"Estamos considerados como un país que puede exportar moda, que tiene diseño y que tiene ideas propias y originales", asegura.

No obstante, reconoce que el sector tiene también puntos débiles, como el hecho de que a las empresas argentinas les cuesta "llegar a los cánones y a los gastos que tienen en Europa de presentación de marcas" y trabajar hasta con dos temporadas de antelación para poder colocar a tiempo sus prendas en los mercados internacionales.

"Hay potencial y está empezando a ser reconocido internacionalmente", afirma optimista.

Es el caso de la firma de accesorios de Emiliano Albanese, que empezó a vender en ciudades como Madrid, Barcelona, París, Londres o Berna, y que se centra este año por primera vez en el mercado local.

Para los portavoces de esta firma, la industria argentina del diseño "no tiene nada que envidiar" a la de otros países ya que, "con el tema de la globalización, está mucho más parejo todo".

Además, la compañía considera el cambio peso-dólar (1 dólar equivale a cuatro pesos) como una ventaja "importante" que favorece las exportaciones de volúmenes más grandes.

La creciente proyección de la moda argentina en el exterior es también, en parte, producto del auge de las carreras universitarias relacionadas con el sector en el país durante los últimos trece años.

Según la directora del departamento de Diseño Textil e Indumentaria de la Universidad Argentina de la Empresa, Gabriela Mussuto, "la educación en diseño está en crecimiento".

"La moda argentina está empezando a tomar preponderancia y a crecer, los diseñadores afuera están empezando también a venir acá a buscar nuevas tendencias y nuevos lenguajes; hay como un mercado en crecimiento", señala a Efe.

"Uno de los valores que tiene el argentino es la creatividad y la capacidad para generar nuevas cosas", apunta.

Mussuto destaca que en la actualidad se busca "exportar el diseño, y no solo la materia prima, como se hacía antes" y presume de que en Argentina hay "muchas cabezas frescas y muchas cosas nuevas para ver".

Quizá por eso, la actual edición de la BAFWeek cuenta con una jornada más que en anteriores convocatorias y los organizadores prevén superar ampliamente los cerca de 31.000 visitantes del pasado año. EFE

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